Hace unos días Maite Ruiz de Austri recibió una llamada de sus compañeros de la Academia de Cine para comunicarle que habían decidido que fuera ella quien entregase este año el Goya a la Mejor Película de Animación. “Les dije: si a vosotros os parece bien a mí también. Estupendo, contad conmigo”. Al día siguiente la llamaron para decirle que la Comisión de la Gala de los Goya había decidido que “sólo entregarían los premios gente famosa, y yo no soy famosa”, relata esta directora, guionista y productora de cine ganadora de dos Premios Goya a la Mejor Película de Animación que el 2 de febrero estrenará en el cine ‘La bola dorada’, la primera película no animada que produce. Este largometraje ya ha sido premiado en el Calcutta International Cult Film Festival de India, en la categoría de cine infantil y familiar.

¿Qué es ser famosa? Se pregunta Maite Ruiz de Austri. “Es que yo no quiero ser famosa ¿No es suficiente mi trayectoria de 30 años ni haber sido pionera de la animación en España, ni los dos Goya además de otros reconocimientos internacionales recibidos?”. Su filmografía y su profesionalidad no bastan. La combinación mujer y cine de animación –el hermano pobre del cine- no ha sido muy satisfactoria para esta vasca afincada en Extremadura, a donde llegó en la década de los 90 y creó la productora Extra Producciones con Íñigo Silva.

Ya el año pasado, harta de ser invisible y del ninguneo dio un golpe encima de la mesa y dijo: “¡Se acabó!”. Anunció públicamente que se retiraba de la animación –ya estaba trabajando en ‘La bola dorada’, el primer largometraje de cine en imagen real de Extra Producciones- y llamó a las cosas por su nombre. El techo de cristal no ha conseguido aplastarla pero sí asfixiarla. Ella, escasa de habilidades para convertirse en una famosa, se pasó 30 años de su vida creando historias y seres mágicos que transmitían valores a los más pequeños.

Maite Ruíz de Austri, miembro de CIMA, la Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audiovisuales, no habla desde el rencor de la artista despechada, sino desde la preocupación por lo que está sucediendo en el mundo del cine, de la cultura y de la creatividad. “No tiene mucha importancia lo de los premios, pero es un síntoma”, añade.

Ella, a pesar de haber ganado dos Goya a la Mejor Película de Animación por ‘El regreso del viento del norte’ (1995) y por ‘¡Que vecinos tan animales!’ (1999), y haber sido nominada con sus otras cinco películas de animación, nunca desfiló por la alfombra roja. Los profesionales de esta especialidad consiguieron hace poco que los nominados al Goya por la Mejor Película de Animación pudieran pasar por la alfombra, “hasta no hace mucho sólo podían desfilar por ahí las chicas estupendas y los chicos guapísimos”, señala.

Lo que a Maite Ruiz de Austri le preocupa realmente es que no hay espacio para las productoras independientes y la películas pequeñas, y que el dinero de las subvenciones se mueva siempre en los mismos circuitos de amigos e influencias.

“De toda la vida han existido los amigos, los conocidos y las llamadas de teléfono, no es algo nuevo, pero había una legislación que contribuía a que muchos proyectos pudieran encontrar un hueco para salir adelante, pero eso ha cambiado mucho. Ahora mismo la legislación que tenemos protege a los grandes proyectos que vienen de la mano de la televisión. A las ayudas del ICAA (Instituto Cinematografía y Artes Audiovisuales) no te puedes presentar si no vas de la mano de la televisión. Hemos pasado de promocionar películas de autores y productores a dar el dinero directamente a las televisiones privadas para producir”.

Al final, los pequeños proyectos no salen adelante y se cierra así el camino a la creatividad y al talento. “Vamos a asistir a una pérdida importante de creatividad en el cine, cada vez se va a aparecer más a la televisión y al espectáculo”, añade.

LA NUEVA EXPERIENCIA CINEMATOGRÁFICA DE MAITE RUIZ DE AUSTRI

Esta directora considerada no famosa por la Academia de Cine sigue su camino ahora con la imagen real. ‘La bola dorada’, en la que debuta como actriz la cantante extremeña Soraya Arnelas, se empezó a gestar hace cuatro años y fue una prolongación de su anterior proyecto, ‘Técula Mécula’, el programa infantil que hizo para Canal Extremadura Televisión y que se emitía los sábados por la mañana. Con los mismos personajes se hizo una obra de teatro y algún cuento. Ahora la película, destinada al público infantil y familiar, muestra el otro punto de vista, el de los niños que ven esa serie de televisión.

Dirigida por Aitor Aspe, ‘La bola dorada’ cuenta la historia de Bea, una niña de 7 años que se refugia en su imaginación al no ser muy popular entre sus compañeros. Sus únicos amigos son imaginarios, Teo y Sofí, los presentadores de su programa favorito de televisión que se emite los sábados por la mañana y que ella nunca se pierde. Contra toda lógica, ambos mundos se mezclan cuando los habitantes de los dos lados de la pantalla saltan de un mundo a otro intentando resolver sus problemas. Esto provoca situaciones muy divertidas en las que se demuestra que lo que funciona en uno no funciona en el otro y que cualquier cosa es posible si somos capaces de aceptar las diferencias del otro con generosidad.

La bola dorada
Una imagen de la película ‘La bola dorada’, el primer largo de imagen real que produce Maite Ruiz de Austri.

“Con esta película pretendemos llamar la atención sobre la importancia de dar una oportunidad y de escucharse. Que nadie se quede solo, no dejemos que la gente se quede sola, con paciencia podemos ser amigos aunque no compartamos todo. Muchos niños se van a ver reflejados en las diferentes cosas que suceden en la película”.

Esta experiencia ha sido para Maite Ruiz de Austri muy interesante, ya que técnicamente es muy distinto a una película de animación, que lleva mucho más tiempo. “Me ha permitido trabajar con profesionales con los que no solía trabajar, desde maquillaje, peluquería y arte, a trabajar con actores, que ponen mucho en lo que sucede en la película, mientras que en el papel todo es dibujar. Es más agradecido porque hay más gente en el proceso creativo”.

Ha contado con un equipo cien por cien extremeño, “porque el proyecto nació así, ‘Técula Mécula’ era extremeño”. José Lucia (el padre de familia), Pedro Rodríguez (su jefe), Francis Lucas Macarro (el profesor Aburrimiento) o Soraya (la madre), junto  con los actores Germán Jiménez, Lola Álvarez, Simón Ferrero, Ana Rodríguez, Cándido Gómez y Carlos Wu forman el reparto de ‘La bola dorada’. Los guiones son de Juan Velarde y de Maite Ruiz de Austri y la película cuenta con la colaboración de Televisión Española y Canal Extremadura.

Es la primera película de la cantante extremeña Soraya Arnelas, a la que está muy agradecida. “Soraya ha sido muy generosa, ha apostado por la película desde el primer momento, siempre ha estado disponible y ha sido una gozada trabajar con ella y con todo el equipo. Ha sido una experiencia muy bonita, ahora todos estamos expectantes con el estreno en el cine, con muchas ganas de que la gente la pueda ver”.

De momento se han distribuido 25 copias por Extremadura y algunas otras ciudades, la idea es que se pueda ver en los sucesivos meses en el resto de España. Poner una película en el cine es muy costoso para un trabajo de pequeño presupuesto, «pero al final las cosas salen, no se pueden dejar de hacer».

Maite Ruiz de Austri, que sólo ha conseguido una subvención en todos sus años de carrera, se está replanteando las cosas, estudiando nuevos proyectos que le llegan y siente muchas ganas de seguir haciendo cosas, “porque esto es muy vocacional”, dice.

Guadalupe Leitón
Periodista

Autor

Magazine Cultural de entrevistas, reportajes y noticias que recoge las creaciones culturales y artísticas que tienen como origen o destino Extremadura.

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